Todas las noches se ahogaba en alcohol. Todas las mañanas
despertaba entre pesadillas y bolsas de basura, con el cuerpo lleno de marcas
amoratadas.
Cuando lo encontraron, su cadáver sonreía. Lo había
conseguido, su conciencia estaba muerta.
Raelana Dsagan
2 comentarios:
Me ha parecido una idea de un optimismo increíble dentro de un historia atroz :) ¡Esta genial!
¡Gracias, Uriska! :D
Publicar un comentario