De forma insaciable te alimentas de mi desconsuelo socavando mi lucidez. ¡Te añoro en amarga soledad! Viéndome asaltado por la duda recaen sobre mí oníricos pesares. ¿Por qué es la locura la única que me tiende la mano? ¿En qué momento la ilusión pasó a ser vista como un difuso sueño? ¿Por qué no maduran las semillas que regaron mis lágrimas de esperanza lo suficiente, para obtener el fruto que mitigue este espíritu hambriento de una pasión que compartiría contigo? Solo deseo que el futuro me deje recolectar alegrías sembradas en las tierras yermas de un amor que se muere.
Autor: Ángel Vela, "palabras"
Correo Electrónico: lanaiel(arroba)hotmail.com
2 comentarios:
Me estoy aficionando a tus fragmentos, larentos, lolentos, macilentos. xDD
Este es bueno, pero sobre todo me gusta su frase final.
Muy agradecido por pasar de nuevo, se ve que cogiste carrera.
Celebro que te guste.
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